Análisis: Quilmes y Dior a través del tiempo
- Mentes de tinta
- 18 oct 2018
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 22 nov 2018
Diferencias y similitudes entre marcas completamente opuestas

Análisis de publicidades: Quilmes a través de tiempo
Al igual que todas las demás marcas Quilmes fue evolucionado y mutando a través de los años. Es importante destacar que el elemento cambiante es el ambiente y el entorno social en el que el producto es consumido.

Esto puede apreciarse viendo cómo al comienzo las publicidades mostraban su bebida dentro de un ambiente familiar (En la mesa a la hora de cenar- 1960), luego estaba presente en reuniones formales con amigos e incluso se servían en copas para darle distinción (1970) y finalmente a partir de 1980 comenzó a dársele otra connotación, esta vez dentro de círculos más cercanos e informales y en lugar de brindar estatus, en ese entonces comenzó a asociarse esta cerveza con el concepto de diversión y conquista, dándole un nuevo enfoque a la figura de la mujer.

Es decir que la percepción de la figura femenina cobro un nuevo matiz en el que aparecía exhibida junto a la cerveza -pero jamás tomando de ella- como si fueran dos premios que van de la mano.
Sin embargo a pesar de todos esos cambios el mensaje principal siempre prevaleció: Quilmes= El sabor del encuentro. En todos sus anuncios puede verse cómo Quilmes se vuelve la razón o excusa por la que la gente se reúna ya sea en familia o con amigos. En otras palabras, las juntadas no eran posibles sin una Quilmes de por medio.
Respecto a los colores, a pesar de que obviamente las publicidades eran de tonos más apagados en el pasado, se mantuvo el uso de azul y blanco en todas las épocas ya que éstos son aquellos que aparecen en su logotipo y los cuales representan un patriotismo que siguió a la marca desde su concepción.
También puede decirse que siempre se expuso el producto de forma directa ya que en todas las campañas se puede ver la botella de Quilmes con su estilo característico luciéndose en las publicidades gráficas como el centro de la atención, acompañándonos fielmente en nuestro recorrido como argentinos.

Dior a través de las décadas

En el caso de Dior, cabe observar que al ser una marca principalmente centrada en el consumo femenino, se vuelve más notorio este cambio en el ambiente y el entorno social previamente nombrado.

Ya que se podría decir que el rol y la percepción general de la mujer es uno de los hitos más cambiantes a través del tiempo.
Dicho esto, se puede observar que en las publicidades de los años 40’ de Dior la mujer se veía más aniñada, reservada y en ocasiones mojigata.
Luego, en los años 50’, la mujer que se representaba era más provocativa y de curvas rígidas, teniendo en cuenta el entorno social de la época.

En los 60’ comenzó a verse una mujer seria, sobria y con cierta elegancia. Unas décadas después, las publicidades comenzaron a representar una figura femenina de carácter romántico, excéntrico, haciendo enfoque en su rostro y maquillaje.
Al comenzar el nuevo siglo, las mujeres de Dior se encontraban con el pelo suelto, con fondos y luces coloridas, que le daban un aire de libertad, expresión. Finalmente, en la última publicidad (2010), se observa un estereotipo de curvas naturales, con mayor desenvoltura y exposición.

En conclusión, podemos decir que ambas marcas han evolucionado acorde al paso del tiempo, siendo que las publicidades de las dos, incluso en la clara diferencia de producto, se van volviendo más despreocupadas, alegres y “modernas”.
Por otro lado, una diferencia notable entre las marcas es el “target”. En el caso de Quilmes, el público actual son los hombres, o más bien hombres jóvenes. Mientras que el público de Dior está compuesto sobre todo por mujeres. Sin embargo, en ambos casos se la pone a la mujer en un lugar muy particular. Se podría decir que, en estas publicidades, como en muchas otras, la mujer es representada como un objeto de deseo. En el caso de Dior, las mujeres que aparecen en las publicidades representan un estándar de belleza, “ellas son todo lo que cualquier mujer aspira a ser”. Así mismo, las mujeres de Quilmes son un objeto de deseo del hombre. Esas mujeres representan lo “deseado” por cualquier hombre, al igual que la cerveza. Además, al ser lo deseado por el hombre, también van a ser lo deseado por el otro sexo, ya que las mujeres buscan parecerse a esa imagen idealizada para ellas mismas ser deseadas.
Marcas como estas son las que le dan forma al pensamiento de la sociedad hoy en día, son las que dictaminan lo que es correcto y lo que no, lo que es aceptado y lo que debe ser marginado. Por eso es importante que se analice todo lo que significan, no sólo el producto que publicitan.
Micaela Manuel, Florencia Cappanera, Abril Aci Kugel
¡Qué buen análisis, chicas! Las felicito.